Índice situación actual de la observación electoral en América Latina
Después de leer con atención el índice puedo dar fe de un trabajo extenso de compilación de información y desarrollo de variables que en verdad es digno de admiración. He sido parte de procesos de investigación a nivel mundial en materia de observación electoral y juventudes y me consta lo complicado de encontrar información y más aún encontrarla sistematizada, en hora buena por el esfuerzo.
Me parece que el índice es útil en dos dimensiones principales, la primera para quienes realizamos observación electoral desde la sociedad civil organizada y quienes la realizan desde la cooperación internacional. El segundo nivel es para los Estados y sus instituciones electorales, las cuales impulsan el ejercicio ciudadano de observar los procesos electorales y sus posibles mejoras. Siempre es bueno medir, medir resultados, impacto, calidad, y otras variables incluidas en este ejercicio. Lo que no se mide no se mejora, dicen, y es por ello que la utilidad de este primer índice es clave.
Creo que vale la pena que en un segundo ejercicio se pueda diferenciar el trabajo de los organismos internacionales que realizan observación de los ejercicios realizados desde la sociedad civil organizada doméstica pues la diferencia en metodologías y resultados finales puede ser alarmantemente diferente ¿Qué cómo lo sé? Pues por qué llevo 16 años realizando y coordinando misiones de observación electoral desde Organización Fuerza Ciudadana, A.C (sociedad civil organizada) en México y al comparar resultados finales la diferencia puede ser tan abismal que da la impresión de que observamos países diferentes. Otro apartado que les sugeriría incluir son los reportes finales realizados y que emanan de los ejercicios de observación electoral internacionales y domésticos pues estos son CLAVE para saber si realmente hay un impacto, una incidencia en lo que se observa y se recomienda y su implementación por parte de los entes observados, les adelanto que el resultado es preocupante y nos deja mirar, por ejemplo, la cantidad de turismo electoral que se realiza bajo la excusa del ejercicio de observación electoral y que dichos ejercicios tienen cero impacto y sí altos costos para su realización.
Concluyo mi reflexión conminado a que este ejercicio sea ampliamente difundido, que llegue a las instancias electorales nacionales y locales de todo América Latina, que se realicen traducciones a diversos idiomas para dar a conocer el trabajo que se realiza de este nuestro lado del mundo. Hay mucho que compartir, pero también mucho que aprender de colegas de todo el mundo que una vez que puedan tener este ejercicio de análisis y comparación de nuestro continente en sus manos podrán hacer lo propio en sus territorios.
Muchas gracias por considerar mi visión y experiencia y ya espero con curiosidad su segunda edición. Felicidades.
Ingresa al Índice de Observación Electoral de América Latina
